El presidente del Instituto de Cultura del Chaco, Francisco Romero, confirmó que se suspendió la participación de la delegación oficial chaqueña en el festival de Cosquín.
La decisión fue tomada de manera conjunta con el gobernador y la ministra de Salud.
Cabe destacar que Chaco volvía al escenario mayor de Cosquín luego de muchos años sin participar de manera oficial, y llevaba una comitiva de más 70 artistas que iban a representar la pluralidad de voces de nuestra provincia y contar, a través del canto y el baile, la historia de la provincialización al cumplirse 70 años de la misma.

Dicha baja se debe al aumento de casos de coronavirus y como manera de cuidar y evitar los contagios de nuestra delegación.
En una reunión virtual, en la que participaron el equipo de directores y de producción de la obra, las autoridades máximas del Instituto de Cultura y la ministra de Salud Pública de la provincia, Carolina Centeno, se llegó a la decisión de priorizar el resguardo de la salud y la vida de los integrantes de la delegación oficial chaqueña, compuesta por 80 artistas, técnicos y hacedores culturales.

El presidente del Instituto, Francisco «Tete» Romero, explicó: «realizamos las interconsultas con las máximas autoridades del Ministerio de Salud de nuestra provincia, con el propósito de contar con la información necesaria que nos permita proteger y cuidar a nuestra delegación oficial, ya que a la fecha más de diez de sus integrantes arrojaron casos positivos de COVID-19».

«El equipo artístico me planteó que no estaban dadas las condiciones, luego consulté con la ministra de Salud de Chaco, Carolina Centeno, y en función de eso estamos tomando la decisión de no asistir a Cosquín, la más difícil para nosotros pero considero también, la más responsable. Se trata de una construcción colectiva del cuidado común», reconoció.
Por su parte, la ministra de Salud de Chaco, Carolina Centeno, remarcó que la recomendación del Ministerio «siempre va hacia la protección de la salud y evitar el contagio. La pandemia nos desafía a pensar colectivamente cuál es el beneficio de determinadas acciones en virtud de la protección y el cuidado de la salud y de la vida de las personas».
Respecto de la variante Ómicron que es la de mayor circulación en Córdoba, indicó que «es una variante tres veces superior al contagio de la variante delta y tiene además una capacidad infectante de entre 30 y 40 segundos», con lo que consideró que «es muy alta la posibilidad de que buena parte de la delegación o su mayoría se contagie y entonces se tenga que hacer el aislamiento en una provincia, que más allá de su buena voluntad y predisposición tiene muy complicada su capacidad sanitaria de internación». Si eso se produce, además, la delegación «queda sin capacidad de acción ni de producción de ningún tipo de bien o servicio o de espectáculo o de desarrollo cultural que uno quiera hacer».

En este sentido, Centeno remarcó «la importancia de que se evalúen todas estas cuestiones y las herramientas como cuerpo y lo hagan comprendiendo que no hay que poner lo económico por sobre la salud o la salud sobre lo económico, ya que la salud también impacta en lo económico».
Asimismo, insistió en que «las medidas de cuidado son las que nos permiten evitar el contagio. Esta pandemia nos ha demostrado que existen herramientas de cuidado que se pueden utilizar y se pueden sostener para prevenir el contagio, por un lado, y después para prevenir la enfermedad grave y la muerte. Hoy tenemos el barbijo, el distanciamiento, el lavado de manos, la ventilación cruzada para prevenir contagios y después tenemos la vacunación como una herramienta para evitar la enfermedad grave y la muerte o por lo menos disminuir el riesgo».