El gobernador brindó detalles sobre la cumbre convocada por el gobierno nacional para analizar las negociaciones por la deuda de 100 mil millones de dólares tomada por el gobierno de Cambiemos. «Cada dólar que pagamos en concepto de deuda, es menos obras y menos desarrollo pero más transferencia de recursos para quienes lucran a costa de la pobreza de los pueblos», subrayó.
El gobernador Jorge Capitanich realizó, este jueves, una conferencia de prensa donde brindó detalles de su participación en la cumbre de gobernadores convocada por el presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía de la Nación Martín Guzmán para analizar las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por el pago de la deuda de 100.000 millones de dólares tomada por el gobierno de Cambiemos que condiciona las políticas públicas y la vida de todos los argentinos y argentinas.
“Es inadmisible que se siga condicionando el desarrollo de los pueblos por la irresponsabilidad de funcionarios y gobiernos y la acción desmesurada y especulativa de los fondos de inversión que lo único que han hecho en el mundo es provocar más pobreza, más exclusión y más miseria”, sostuvo.
El mandatario destacó el esfuerzo del presidente Fernández para una negociación digna que defienda los intereses del país. “Aun así, la mejor negociación con el FMI, implica severos condicionamientos para el presente y el futuro del país, por lo que se está planteando una estrategia que nos permita lograr un periodo de gracia, donde la República Argentina pague solamente servicios de intereses de la deuda durante los próximos cuatro años”, indicó.
Además resaltó otras estrategias como que el plan de amortización sea equivalente a no menos de 10 años, que la tasa de interés sea compatible con el estándar internacional, es decir que se elimine la sobrecarga de intereses y que los derechos especiales de giro que fueron utilizados para la cancelación de los servicios de capital de intereses durante 2021 y 2022 sean restituidos. “Fueron aportes por más de 600 mil millones de dólares que el FMI puso a disposición de los países miembros con el objeto de generar condiciones para atenuar el impacto negativo en sus respectivas economías de la pandemia Covid-19”, recordó.
Durante la cumbre, el mandatario provincial planteó tres cuestiones urgentes a definir con precisión: el sendero del déficit fiscal y su grado de cumplimiento; el sendero del financiamiento monetario del déficit fiscal, es decir emisión monetaria; y por último la tasa de interés y su grado de retroalimentación del proceso de endeudamiento de moneda local y la sustitución creciente de los vencimientos de moneda extranjera.
“Argentina con el impacto de la pandemia en 2020 tuvo un déficit fiscal del 6.5 por ciento, el cierre del ejercicio 2021 implicará cerca del tres por ciento, el sendero que se plantea en esta negociación es llegar a 2028 en equilibrio, con reducción gradual del déficit para ser sostenido a partir del 2030 en términos de equilibrio fiscal y financiero”, explicó.
“Este endeudamiento es un modelo de saqueo del país”
Capitanich señaló que la deuda del gobierno de Mauricio Macri, que compromete los derechos y la calidad de vida de todo el pueblo argentino, ha tenido cómplices locales. “Me sorprende cuando los referentes locales no se hacen cargo de sus responsabilidades, el endeudamiento sirvió solo para la fuga de capitales, es un modelo de saqueo y el problema es que ahora la deuda es nuestra, de todos los argentinos y argentinas, mientras que quienes la contrajeron están enseñando en universidades del exterior y los grandes estrategas del financiamiento desaparecieron”, expresó.
En ese sentido indicó que un endeudamiento que no genere beneficios para el pueblo, inversiones en educación, salud, desarrollo ambiental y productivo, es un endeudamiento perverso tomado para ensanchar la brecha entre ricos y pobres. “Chaco no recibió los beneficios ni de las deudas con los acreedores privados ni de la deuda con el FMI, el segundo acueducto del interior lo ejecutaron solo ocho por ciento, la ruta 7 la dejaron incompleta, no hicieron ninguna ruta en El Impenetrable, no hicieron cuadras de pavimento urbano, no promovieron obras energéticas y paralizaron obras de viviendas, cada dólar que pagamos en concepto de deuda, que se tradujo en fuga de capitales, es más deuda que beneficia a los ricos y menos pesos para los más pobres, menos obras, menos desarrollo y sin embargo más transferencia de recursos para aquellos que lucran a través de los fondos de inversión y a costa de la pobreza de los pueblos”, concluyó.