Monitorean al fenómeno «El Niño» para mitigar eventuales efectos en Argentina

Monitorean al fenómeno «El Niño» para mitigar eventuales efectos en Argentina

“En la Argentina suele producir un aumento de las precipitaciones y en los años que han sido ‘moderados a fuertes’, que es lo que se espera en esta oportunidad, generó inundaciones”, sostuvo la secretaria ejecutiva del Sistema Nacional para la Gestión Integral del Riesgo (Sinagir), Silvia La Ruffa.

La secretaria ejecutiva del Sistema Nacional para la Gestión Integral del Riesgo (Sinagir), Silvia La Ruffa, afirmó este viernes, en ocasión de conmemorarse el Día Internacional para la Reducción del Riesgo de Desastres, que el organismo trabaja en el monitoreo del «fenómeno climatológico de El Niño, sobre todo en sectores del Noreste, Misiones y Corrientes», con el objetivo de mitigar eventuales efectos adversos.

«Según las Naciones Unidas (ONU), entre 2015 y 2022 se han reducido en el mundo las muertes por catástrofes y desastres», destacó La Ruffa en una entrevista.

La Ruffa señaló que desde el Estado trabajan de forma articulada en virtud de la Ley 27.287 sancionada en 2016, que crea el Sinagir sobre los valores y principios del «Marco de acción de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres», aprobado por Naciones Unidas que promueve que los estados trabajen articuladamente en todos los niveles de Gobierno.

Esta articulación se da “con las organizaciones de la sociedad civil y el sector empresario”. “Además, nuestra ley creó la Red de Organismos Científico-Técnicos para la Gestión Integral del Riesgo (RED GIRCyT) para prevenir y, en los casos que no sea posible evitar que ocurra el evento adverso, mitigar el impacto que puedan tener sobre nuestra población”, mencionó.

Sobre qué características tiene un desastre, mencionó que “si el Gobierno local puede resolverlo sin pedir colaboración provincial es una «emergencia»; cuando se requieren recursos provinciales y nacionales es un «desastre», y se convierte en «catástrofe» cuando, además, hay que solicitar colaboración de tipo internacional para la respuesta o reconstrucción posterior”.

“Nuestro país, al tener una extensión geográfica tan grande y con diferentes climas, tiene diversas amenazas naturales como nevadas en la zona sur, inundaciones en el litoral y zona centro, y algunas otras que atraviesan todo el país como los riesgos forestales, sequías, emergencias hídricas, sismos y actividad volcánica”, comentó. “También se prevé otro tipo de amenazas como las tecnológicas, derrame de material peligroso o explosivo, la posibilidad de alguna emergencia de tipo nuclear o radiológica, y fenómenos climatológicos con mayor impacto sobre las rutas como el humo durante un incendio”, detalló.

La Ruffa insistió en que actualmente trabajan en el monitoreo por indicación del jefe de Gabinete, Agustín Rossi, presidente del Consejo Nacional del Sinagir, los efectos del evento climatológico de El Niño. “En la Argentina suele producir un aumento de las precipitaciones y en los años que ha sido «moderado fuerte», que es lo que se espera en esta oportunidad, generó inundaciones”, sostuvo.

“Las áreas con mayor probabilidad de que ello ocurra son las zonas del Litoral y parte del NEA (Noreste argentino), Misiones y Corrientes. En particular estamos siguiendo el comportamiento del río Iguazú porque está por arriba de la marca aceptada como «tranquila». Venimos de tres años seguidos -del fenómeno- de La Niña, por eso la sequía fue tan fuerte”, detalló.

“Hay ríos como el Paraná o el Iguazú que permiten con mayor tiempo saber que se van a desbordar, y las municipalidades disponen de 12 a 20 horas para generar esa autoevacuación. En los casos que exceda la previsión siempre se puede pedir colaboración a las provincias y las provincias a la Nación, que es lo que diseñó Rossi, que estemos articulados los ministerios de Ambiente, Defensa, Seguridad, Desarrollo Social y Salud, ante cualquier demanda que pueda generar este fenómeno meteorológico”, sumó.

“Somos unas 60 personas, más el sistema nacional de bomberos voluntarios, que son alrededor de 40.000 hombres y mujeres activos, más el apoyo de las fuerzas federales y organizaciones de la sociedad civil que, a través de la figura del voluntariado, colaboran con la protección civil. También se suma el área de Defensa, que dispone de una Secretaría de Coordinación Militar para la Emergencia y tienen recursos humanos y logísticos dispuestos, como están haciendo ahora con la repatriación de argentinos en Israel más los equipos de provincias y municipios”, cerró.